Por qué Historias con Lupa

Si uno le pone una lupa a una tela aparentemente lisa descubre nudos impensados, hilos desparejos antes imperceptibles. Lo mismo pasa con la Historia. Cuando uno la mira con una lente inquisitiva, aparecen las vidas privadas, las mezquindades y los heroísmos y, en el fondo silencioso, los deseos, esos que explican de verdad las conductas. Esto queremos aquí: mostrar las historias con minúscula, los hilos imperfectos pero espléndidos que forman el tejido de la Historia con mayúscula.

Pero hay también otro modo. Una historia, esta vez de lo más íntimo, el cuerpo, escrita con imágenes. Para eso hay que ir a www.imagenesdelcuerpo.blogspot.com.

viernes, 25 de marzo de 2016

Imago nos. Antes del Obelisco

Plaza de la República, Buenos Aires, 1936
El tranvía circula justo donde poco después, el 23 de mayo de 1936, se elevaría el Obelisco, ese bodrio en perspectiva, al decir de los críticos de entonces, que nunca faltan.
El paisaje está dominado por una publicidad de los celebérrimos jabones Le Sancy.
Debajo, la tienda “A la ciudad de Londres”, que había sido una de las tiendas más elegantes de Buenos Aires pero que ahora anunciaba saldos de batones. En la fachada, un cartel: “Liquidamos totalmente. Cierre definitivo por ensanche Corrientes”. Enfrente, el “Trust Joyero Relojero”. Ahí se podía comprar cristales de Bohemia, joyas de París y también unos despertadores baratísimos. 
Despreocupadamente, una mujer y un hombre cruzan la calle Cerrito.